Mal juego, victoria segura

El Real Madrid ganó al Recreativo de Huelva por 2-3 y aumenta su ventaja a cinco puntos gracias al tropiezo del Barcelona en el Calderón. El regreso al equipo de Robinho, que marcó dos goles, fue clave. El arbitraje de Iturralde González, secundado por su linier Rafa (no me jodas) Guerrero, fue lamentable. Tanto o más que la espantada de Schuster de la rueda de prensa ante los periodistas.

Qué cosas tiene la vida. Los blancos jugaron bien una serie de partidos que los fueron perdiendo uno tras otro. Fue un mes de febrero muy negativo ya que sólo se sumaron tres puntos de 12 posibles. Pero los jugadores madridistas volvieron a mostrar un pésimo juego pero salieron premiados con los tres puntos. Los motivos por la mala imagen pudieran ser la falta de Guti en el centro del campo o la de Van Nistelrooy en la punta del ataque. Sin el '14 los blancos no saben a quien darle la pelota y por ello se abusa del pelotazo y sin el holandés, se pierde la referencia en ataque.

Con ese panorama el Madrid salió a verlas venir y un muy motivado Recre a por el partido. Por ello, pronto se adelantaron los andaluces en el marcador. Cáceres remató solo dentro del área pequeña una falta lateral botada por Martins. Está vez fue Sergio Ramos quien olvidó su marca. Diez minutos después Raúl empató el partido. El capitán blanco marcó de cabeza y en fuera de juego un buen centro de Drenthe. El famoso linier Rafa Guerrero no vio la posición ilegal del '7.

Aunque éste no sería el único error de Rafa. Ya en la segunda mitad expulsó él solito a Beto después de ver una supuesta agresión de éste sobre Heinze. Iturralde le expulsó, pero cuatro minutos más tarde volvió a equilibrar las fuerzas tras mostrarle la segunda tarjeta amarilla a Sergio Ramos por saltar con los brazos extendidos. El juego no era nada del otro mundo, pero Iturralde hacía todo lo posible por animar el cotarro.

En el minuto 64 entró al campo Quique Álvarez y en el 69 se fue expulsado. La roja directa fue merecida ya que la entrada a Robben fue criminal y pudo romperle el tobillo (el holandés tiene para un mes de baja). Así estaba el partido cuando a falta de 15 minuto salió Robinho. El brasileño se había perdido tres partidos y tenía ansia por jugar. Pues fue salir y marcar. La primera pelota que tocó fue para mandarla al fondo de las mayas y poner por delante a los suyos.

El gol mató a un Recre al que ya no le quedaba gasolina después de una primera parte donde derrocharon energías en la presión. Y Robinho estaba fresco para aprovechar los huecos que proporcionaba un partido de 10 contra nueve. Cuando el partido tocaba a su fin, Gago se disfrazó de Guti y le dio un pase espectacular al brasileño que lo transformó en una vaselina inalcanzable para Sorrentino.

Antes de acabar le dio tiempo a Martins a marcar un soberbio gol de falta que dio emoción a los dos últimos minutos del descuento. Los blancos acaban la jornada como líderes y con cinco puntos de ventaja, pero eso no es suficiente para que Schuster esté contento. Su rueda de prensa duró 35 segundos. El alemán se negó a hablar del arbitraje y decidió irse dejando plantandos a los periodistas. El Real Madrid debe ser un ejemplo fuera y dentro de los terrenos de juego y con comportamientos así se pierde parte de la grandeza de este club.